Hace unos meses durante la celebración del Brand Pulse, tuve el placer de tener una conversación abierta con Jorge Álvarez-Naveiro de Grupo Antolín donde abordamos muchos de los retos del sector industrial y llegamos a la conclusión de que en procesos expansivos con crecimiento inorgánico además de tener una hoja de ruta clara, es clave disponer de una cultura sólida en la que se integren las compañías adquiridas.
Posteriormente he tenido la ocasión de hablar con muchas compañías del sector industrial y me ha obtenido una serie de conclusiones que quiero compartir en este post.
Como sabemos el sector industrial está experimentando una ola de fusiones y adquisiciones (M&A) en los últimos años, impulsada por una serie de factores, como la globalización, la innovación tecnológica y la búsqueda de eficiencias operativas.
- Consolidación del mercado y búsqueda de sinergias.
La consolidación del mercado es una tendencia clave en el sector industrial, ya que las empresas buscan fusionarse o adquirir competidores para lograr economías de escala, diversificar sus portafolios de productos y servicios, y mejorar su posición competitiva. Además, las sinergias operativas y financieras resultantes de las M&A pueden generar ahorros significativos y aumentar la rentabilidad de las empresas involucradas. - Innovación tecnológica y transformación digital.
La rápida evolución de la tecnología y la creciente importancia de la digitalización están impulsando la actividad de fusiones y adquisiciones en el sector industrial. Las empresas buscan adquirir o fusionarse con otras compañías que poseen capacidades tecnológicas avanzadas o modelos de negocio disruptivos para mantenerse competitivas y adaptarse a los cambios en el mercado. Un ejemplo de esto en España es la adquisición de la empresa tecnológica Asti Mobile Robotics por parte de ABB, lo que permitió a ABB expandir su oferta en soluciones de automatización y robótica. - Globalización y expansión geográfica.
La globalización ha llevado a las empresas industriales a buscar oportunidades de crecimiento en nuevos mercados y regiones. El sector industrial se está apoyando en este modelo de crecimiento como una forma efectiva de expandirse geográficamente y acceder a nuevos clientes, recursos y canales de distribución. - Propósito y Sostenibilidad.
La creciente preocupación por el medio ambiente y la responsabilidad social también está influyendo en el sector industrial. Las empresas buscan fusionarse o adquirir compañías que compartan sus valores y enfoques en cuanto a la sostenibilidad y la responsabilidad social para fortalecer su reputación y atraer a inversores y clientes conscientes de estos temas.
Un ejemplo reciente es la adquisición de la empresa de reciclaje de plásticos Envaplaster por parte de Indorama Ventures, lo que refuerza su compromiso con la sostenibilidad y la economía circular.
A pesar de las oportunidades que ofrece el crecimiento inorgánico las empresas también enfrentan grandes desafíos en la integración de las operaciones, la cultura corporativa y las estrategias de negocio.
Desde Baud, hemos comprobado en primera persona, que es crucial abordar estos desafíos a través de una planificación estratégica cuidadosa, la comunicación efectiva y la implementación de procesos de cambio y adaptación a través de una sólida cultura de marca.
Trabajar la cultura de marca en casos de fusiones y adquisiciones es clave:
- Facilita la integración de culturas corporativas distintas.
- Crea una identidad y conjunto de valores compartidos entre empleados.
- Refuerza la reputación y percepción de la marca en el mercado.
- Ayuda a retener y atraer talento.
- Fomenta la innovación y adaptabilidad frente a desafíos y oportunidades.
Por muy B2B que seamos, es complejo intentar que el talento se identifique con un nuevo proyecto, si se integran en una compañía que no dispone de una marca y cultura atractiva.